El prejuicio es básico: «Las grandes capitales, como Madrid y Barcelona, son también las capitales de la creatividad». O no. Aparentemente, las grandes ciudades son el lugar en el que los creativos explotamos al máximo nuestro talento para impulsar a grandes marcas en agencias de publicidad (o no), pues la creatividad está al alcance única y exclusivamente de las grandes marcas (definitivamente, no). Como en otros sectores, las empresas siguen confiando antes en una agencia capitalina que en una de su propia ciudad, y en los entornos locales hay reservas a la hora de soltarse la melena.
Las grandes escuelas, universidades, marcas y agencias defienden a capa y espada, no sin razón, los beneficios de la creatividad como motor para este oficio pero parece que cuando hablamos de agencias de publicidad locales, la creatividad se convierte en un elemento de segunda fila; algo abstracto y raro que distrae el mensaje a comunicar. Nada más lejos de la realidad.
El pasado mes de noviembre, CTRL publicidad, una revista referente en el sector, publicó el ranking de las agencias, campañas y marcas líderes en todo el mundo de publicidad, comunicación y medios. Tristemente, en este ranking no aparece ninguna agencia de publicidad andaluza y no por falta de talento.
Está en las manos de clientes y agencias romper con el anquilosado esquema de la publicidad local sin creatividad. Por parte de la agencia, permitiendo la evolución de creativos locales en la empresa, dando libertad en sus trabajos; por parte del cliente, otorgando más confianza a los profesionales de otras ciudades ya que una infinidad de estudios respaldan la eficacia de esta disciplina a la hora de conectar con el público objetivo de la marca en cuestión.
Los meses que hemos vivido confinados debido a la pandemia han normalizado estos encuentros de trabajo online, demostrando que no hay distancia que no podamos salvar. Los tiempos en los que había que montarse en un AVE para reunirse con una marca de Madrid han quedado atrás y por fin hemos entendido que se comunica igual tanto de forma presencial como a través de una pantalla si la idea es buena, ahora sólo queda demostrar que juntos podemos cambiar las cosas, abrir horizontes y dar un resultado óptimo gracias a la confianza existente entre cliente y agencia. Nosotros sabemos que es posible porque lo hemos experimentado con clientes como el CRE de Nueva York, que está al otro lado del charco, y confió en nosotros para su nueva identidad corporativa, trabajo que nos supuso un Oro en los Premios Anuaria de 2019.
En cuanto a los «canteranos», el futuro de la creatividad no podría encontrarse en mejores manos ya que no son pocos los proyectos de jóvenes andaluces que avalan el potencial de nuestros creativos y creativas ya sea en cuestión de diseño, campañas digitales o campañas de publicidad 360º. Es más, en las resoluciones del certamen Versus para jóvenes creativos organizado cada año por el CdeC, siempre nos encontramos con la presencia de alumnos y alumnas andaluces entre los ganadores como muestra del talento de nuestra tierra en materia creativa. Pero parece que cuesta que un cliente de nuestra comunidad se preste a confiar en tan indispensable herramienta para la realización de esta maravillosa profesión. También deberíamos revisar qué podemos hacer para evitar una fuga de talentos hacia las grandes capitales.
«¿Por qué no hacerlo con estilo?» es una pregunta directa y clara hacia todo este ecosistema: creativos, agencias de publicidad, clientes, marcas, emprendedores, instituciones, seamos grandes o pequeños. Podemos y tenemos que darle una oportunidad al ingrediente creativo y no quedarnos con las ganas de actuar a un nivel superior.